El Plan Integral contra el Dengue, impulsado por la gestión de Rodrigo Müller, busca minimizar el riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos a través de estrategias integrales que combinan prevención, capacitación y promoción de la salud en toda la comunidad.
El plan tiene como objetivos fundamentales:
Prevenir la proliferación de mosquitos.
Fortalecer la vigilancia epidemiológica.
Implementar acciones de promoción y prevención en los barrios.
Formar al personal municipal para realizar las distintas tareas.
El descacharrado en viviendas es una medida esencial para prevenir el dengue, ya que elimina los lugares donde el mosquito Aedes Aegypti, transmisor de esta enfermedad, deposita sus huevos.
Este mosquito necesita agua estancada para reproducirse, y cualquier recipiente, por pequeño que sea, puede convertirse en un criadero. El descacharrado consiste en eliminar o limpiar a fondo estos objetos, conocidos como cacharros, que acumulan agua y representan un riesgo. El descacharrado es una medida de control ambiental sostenible que depende de la colaboración activa de la comunidad y evita efectos adversos en el medio ambiente, como los que podría causar el uso excesivo de insecticidas.
El municipio lleva adelante un operativo domiciliario en todos los barrios de la ciudad. Personal municipal visita las viviendas, realiza el descacharrado, retira los cacharros y brinda información sobre su importancia. Además, se coloca una etiqueta de “domicilio descacharrado” o “domicilio informado”.
Vaciar y dar vuelta los objetos que acumulen agua dentro del hogar.
Renovar con frecuencia el agua de floreros.
Cepillar el interior de los bebederos de las mascotas.
Descartá recipientes y objetos en desuso que puedan acumular agua.
Tapar recipientes en el patio que almacenen agua.
El Aedes Aegypti, mosquito transmisor del dengue, vive principalmente en entornos domiciliarios. Por eso, la fumigación se realiza de forma intra y peridomiciliaria. El municipio lleva a cabo operativos de fumigación preventivos en espacios públicos con un insecticida larvicida biológico y, específicamente cuando se detectan casos positivos, interviniendo en esos hogares y en las manzanas adyacentes con un insecticida larvicida químico.
Ante síntomas como fiebre o dolor corporal, es fundamental acudir al centro de salud más cercano. La detección temprana de la enfermedad es indispensable para que los casos se notifiquen rápidamente y se pueda iniciar el protocolo adecuado. Se recomienda no automedicarse y consultar al médico de manera temprana.